Sedentarismo
Sedentarismo: Sinónimo de Deterioro
La falta de ejercicio o sedentarismo disminuye la capacidad de adaptación a la actividad física posterior cayendo así en un círculo vicioso. A su vez, la proporción de grasa es cada vez mayor en relación con los demás tejidos, aunque no necesariamente haya aumentado de peso, debido a la disminución de la masa muscular.
Si una persona que realiza un trabajo sedentario (como estar sentado frente a una computadora) corre o camina unos kilómetros sin haber realizado un entrenamiento previo, pasará los días siguientes con dolores y molestias. Lo mismo ocurre cuando se comienza a practicar una actividad física.
El sedentarismo acarrea también disfunciones orgánicas: como Constipación; Falta de Movilización de Lípidos; Aumento de Depósitos de Grasa en Tejidos; Tendencia a Disminuir el Trabajo del Músculo Cardíaco; Varices; Mala Circulación; Riesgo de Obesidad; Riesgo de Diabetes Tipo 2; Propensión a la Inflamación de los Órganos Abdominales (provocada por distensión de los músculos debilitados de la pared abdominal), Sensación de Fatiga.
Muchos dolores de espalda que no tienen origen en traumatismos o enfermedades se deben a la debilidad de los músculos de esa zona, que se contractura de forma casi permanente. A menudo, el simple esfuerzo de mantener erguida la espalda representa para el sedentario una exigencia mayor de la que sus músculos son capaces de soportar.